AA.VV
Edición crítica bilingüe preparada por Antonio Piñero y Gonzalo del Cerro.
En torno a Clemente de Roma, personaje legendario, cuya primera mención histórica es la de un oscuro secretario del papa Pío I, se concentraron diversas producciones litera¡rias de finales del siglo I y del II: Primera y Segunda carta de Clemente, dos Cartas a las vírgenes y un conjunto denomina¡do Literatura Pseudoclementina, así llamado probablemente porque desde el siglo II comenzó a circular la leyenda de que este Clemente había sido el discípulo preferido del apóstol Pedro, e incluso una suerte de secretario personal suyo.
Él fue el que consignó por escrito las predicaciones y discusiones teológicas del apóstol con Simón Mago y las envió a Santiago, el «obispo» de la comunidad judeocristiana de Jerusalén. El nombre de «literatura» se debe a que no solo conserva material teológico, sino un relato novelesco que lo engloba: «La novela de Clemente». Se trata de un precioso tesoro literario que abrirá los ojos del lector a un campo poco repre¡sentado en la literatura cristiana antigua, los escrito