BRAGUE, RÉMI
En lo que a mí se refiere, mi tesis será la siguiente: «universidad católica» es una simple tautología. Cada universidad es católica. Una universidad que rechazara el título de «católica», dejaría de ser una universidad. Y por eso precisamente, hay algunas universidades que saben que son católicas; hay también muchas universidades que no lo saben, que lo han olvidado, o que no quieren saberlo y, aún peor, algunas que se empeñan en olvidarlo y quieren eliminar ese adjetivo.
[...]
El mismo proyecto de una universidad, es decir, el cultivo de saberes desinteresados, echa sus raíces en la cosmovisión cristiana. ¿Por qué tendríamos que estudiar lo que no sirve para nada?, por ejemplo, la literatura, la astronomía, la lógica, la matemática pura, y la filosofía.