CURTAZ, PAOLO
INDICE
Enséñanos a orar 5
Caminos 6
A quién orar 8
Dirigidos a un Padre 9
Enséñanos a orar 11
Intento de elaborar un protocolo 13
La oración 15
Un don 17
Padre nuestro que estás en el cielo 19
El nombre de Dios 20
Exagera 21
Llámalas si quieres emociones 22
Perdona si es poco 23
No solo mío 24
La comunidad de los hijos 25
Profecía 26
En el cielo, es decir, celado 27
¡Uf! 28
Curiosos 29
Santificado sea tu nombre 33
¿Vivir, para qué? 33
Kadosh 36
Santos en el Santo 37
¡Santos Ahora mismo! 39
Partícipes 40
Conversiones 41
El Dios de Jesús 41
Santidad difundida 43
Venga a nosotros tu reino 45
El tiempo de en medio 46
Encargos 47
Pero ¿de verdad de verdad? 48
Sin embargo 49
Constructores del Reino 51
¿Quién es la Iglesia? 52
Espera 54
Encuentros 55
Cosas raras 56
Fe sin vacilación 57
Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo 59
Aclaraciones 60
Pero ¿entonces? 61
En Jesús 62
Sin ti, contigo 63
Pero ¿y la cruz, entonces? 64
Tomar la cruz 65
Vivir dando 66
Que se haga tu voluntad de Padre 67
En la tierra como en el cielo 68
Pero cuidado 68
Danos hoy nuestro pan de cada día 71
Lo necesario 72
Día tras día 74
Miedo 75
No solo de pan 77
Aún más 77
Somos de Dios 79
El pan que es Dios 79
Perdona nuestras ofensas como también nosotros
Perdonamos a los que nos ofenden 81
El pecado, antes del perdón 81
Jesús es el perdón 84
Un perdón liberador 86
El centro 88
Entendámoslo 89
Pueblo de perdonados 90
Como también 90
No nos dejes caer en la tentación
y líbranos del mal 93
Traducciones 94
Discernir 96
Tentación 97
El Maligno 99
Lucha interior 100
Un hombre fuerte 101
Batallas 103
Amén 105
Es la oración cristiana más conocida, la única que enseñó directamente el Maestro, que no vino a enseñarnos oraciones, sino qué es la oración. Retomando paso a paso el Padrenuestro entramos en el mundo de Dios, del Dios que Jesús ha venido a anunciar. Para que, orando y meditando las palabras del texto, podemos convertir nuestro corazón al auténtico rostro del Dios de Jesús. Para que no creamos en Dios, sino en el Dios de Jesús el Cristo. «Cuando rezo el Padrenuestro estoy pidiendo que tanto yo como los demás podamos conocer el hermosísimo rostro de Dios, el Santo. Que podamos sentir su caridad, fiarnos, confiar, florecer.»
Paolo Curtaz nos ofrece en esta obra la posibilidad de orar, meditar y reflexionar el Padrenuestro. Saboreemos cada palabra, cada invocación que Jesús nos regaló, porque esta hermosa oración es la que el Maestro enseñó a sus discípulos y a nosotros para dirigirnos al Padre. ¿Por qué tenemos que rezar?....para imitar a Jesús, de quien quiero ser discípulo, nos dice el autor de El Dios de Jesús.